Sala hipóstila, Parque Güell |
No hay duda de que Gaudí fue un
arquitecto original, complejo y extravagante. Sobre todo, a partir de su estilo
tardío que arranca con el nuevo siglo y su proyecto para el Parque Güell. Un
arquitecto único –por eso no ha dejado discípulos-, pero de lo que no estamos
tan seguros es de que fuera un arquitecto moderno. El debate nos llevaría
demasiado lejos para este humilde formato, así que resolvemos incluirlo aquí
simplemente porque es Gaudí.
Si tuviéramos que elegir una obra
suya ésta sería el mencionado Parque Güell, 18 hectáreas de terreno inclinado
en la ladera que da al mar de la montaña del Turó del Carmel, pertenecientes al
industrial Eusebi Güell, más que su mejor cliente, su auténtico mecenas. Gaudí
lo comienza en 1900 y le tiene ocupado hasta 1914. Lo que, en realidad, Güell
le encargó fue una urbanización de lujo en la que el arquitecto tenía que
proyectar 60 parcelas de entre 1000 y 1200 m2 cada una para levantar viviendas
unifamiliares. La inversión resultó ser un fracaso comercial –solo se
construyeron dos casas- pero de esa ladera pelada Gaudí hizo una obra de arte:
respetando el magnetismo de la montaña la convirtió en el más asombroso mirador
de la ciudad, a la vez que hizo de su ascenso, a través de una escalinata de
cuatro tramos entre muros almenados, un ejercicio simbólico de elevación del
espíritu.
Parque Güell, escalera principal |
Pero lo que más nos fascina es el
espacio donde acaba la escalera, la sala hipóstila que sostiene la principal
terraza-mirador. Las columnas de hormigón están huecas para que por su interior
puedan discurrir los desagues que drenan el agua de la plaza. La vista de las
86 columnas, de las que las 17 exteriores se hallan ligeramente inclinadas,
genera una especie de bosque pétreo de lejanas reminiscencias góticas. Todo el
conjunto parece sacado de la ambientación de un extraño cuento oriental.
Quiero destacar, por otra parte, que
de todos los edificios civiles de Gaudí el que más me interesa es el Colegio de
las Teresianas (1890). Las ventanas y pasillos de arcos parabólicos son
impresionantes.
Pasillo de arcos parabólicos, Colegio de las Teresianas |
No hay comentarios:
Publicar un comentario