viernes, 13 de abril de 2012

Valor y Precio (del arte)

Parece inevitable que para poder hablar de arte los medios de comunicación tengan que acogerse al robo, a la subasta o, en menor medida, a los hallazgos fortuitos. Si ahora es Munch quien monopoliza todos los titulares porque uno de sus "Gritos" (esos agujeros negros del rostro por donde desaguaba su ansiedad) va a subastarse a precio astronómico en Nueva York, poco antes lo fue Cézanne por haberse finalmente encontrado en Belgrado lo que antes se robó en Zurich, ese "Muchacho de chaleco rojo" tan carísimo.
E Munch, El grito

Y siempre a vueltas con el precio. Lo que importa parecen ser los precios de estas obras en el mercado, de ahí su presencia estelar en los medios. No debería extrañarnos, entonces, la atracción fatal que ejercen obras de esta naturaleza en ladrones, especuladores y pujadores sospechosamente anónimos (que suelen hacerlo por teléfono), todos ellos muy sensibles al magnetismo de los precios. El valor artístico, histórico, social o estético son zarandajas de especialistas en arte, gente ociosa y bastante pelma  a la que  solo le queda el consuelo de aquello que dijera Antonio Machado: "Todo necio confunde valor y precio".

2 comentarios:

  1. Hace más de un mes que no entraba en tu blog y he pasado más de un hora disfrutando de tus ultimas publicaciones. Textos llenos de información muy interesante, son como un bálsamo, más como un antídoto a todo lo feo nos rodea que últimamente es mucho. Nos salpicas, a los que te frecuentamos, con poesía y con música...gracias y gracias de nuevo por esté maravilloso regalo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias por tus amables palabras. Es evidente que escribo, entre otros, para ti.

      Eliminar